martes, enero 26, 2010

Glimpse

-Creo que puedo resumirlo.
-Dime.

-Esto es una instantánea y nosotros vivimos en ella.

Ella no respondía. Con los ojos entrecerrados se dejaba llevar por construcciones aleatorias, amodorrada y receptiva a la vez.


-No has pensado alguna vez, que quizá al final de todo nos concedan visitar nuestros recuerdos? los que queramos. Y entonces regresas por un rato a momentos como este....

-Sería lindo.

-¿Y si lo hicieras indefinidamente, no sería algo cercano a la inmortalidad? vivir de nuevo todo aquello, por siempre.

-Sería una forma. Como ir al cielo.

-Y si uno de nosotros está visitando sus recuerdos y no somos sino imágenes de algo que tal vez llamamos nosotros, en algún tiempo ...en la mente de quien estamos? ¿la tuya o la mía?

-No me molestaría, ¿a ti si?

-Mucho. Querría decir que nosotros no somos los autores de esta instantánea.

El contorno amarillento, que le recordaba al resplandor de un incendio por la noche, era el complemento ideal para la trompeta aguardentosa que irrumpió en medio de ellos para llevárselos modorramente a alguna otra parte.